A pesar de la captura del narco, persiste la estructura criminal en Honduras

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Juan Orlando Hernández, expresidente de Honduras que ha sido acusado de narcotráfico y de convertir al Estado hondureño en un narcoestado. Durante su mandato, se señala que el dinero del narcotráfico influyó en procesos electorales, financiando campañas y asegurando protección a cambio de impunidad y apoyo a organizaciones criminales. Se afirma que bajo su gobierno se pasó de un país de tránsito de cocaína a uno productor, con cultivos de coca en parques nacionales.


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A medida que surgen testigos propuestos por la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York, Estados Unidos, se descubre el intrincado tejido de corrupción dentro de la institución hondureña que se sumergió y se sometió ante los millones y todos los lujos que otorga la industria del narcotráfico.

Mediante el juicio contra el expresidente Juan Orlando Hernández, acusado de conspirar para el tráfico de drogas y armas, en una corte estadounidense se revela el uso del poder y las influencias políticas que brindaron protección y seguridad a los cargamentos de droga que circulaban por toda la zona norte-occidental del país.

Estos cargamentos dejan millones de dólares, donde parece que nadie se opone; ni policías, militares, jueces, fiscales, ni alcaldes, magistrados o candidatos a presidentes, ellos se dejan conquistar por el narco. Esa economía alrededor del narcotráfico es un tema que debemos seguir estudiando y reflexionando, dice Elvin Hernández, sociólogo e investigador del ERIC-SJ.

RP. ¿Quién era el narco, Juan Orlando Hernández o el Estado?

EH. Con todos los elementos que han surgido en este juicio uno se queda con la idea que Juan Orlando Hernández, JOH, es el narcotraficante y convirtió al Estado hondureño un narco.

Lo que hemos conocido de este juicio plantea dos momentos, uno donde el dinero del narcotráfico penetró a través de los procesos electorales sobornando a  candidatos, financiando campañas, y de ahí fue avanzando a colocar al partido en el poder a cambio de asegurar protección a través de policías y militares, impunidad e información clave para las operaciones del narco. En Honduras se vivió en momentos claves como la elección de la Corte Suprema de Justicia, el Fiscal General y su Adjunto, entre otras elecciones de cargos.

En el caso de Juan Orlando Hernández queda claro que él avanzó a construir un narco partido y ese narco partido llegó a instalar un narco gobierno, y de ese narco gobierno avanzó a construir un narcoestado. En él –JOH-  se miran toda la facetas del narcotráfico, por eso es están emblemático Juan Orlando Hernández, pasó de narco político a convertir a un país y toda su institucionalidad en función del crimen organizado. La Policía, las Fuerzas Armadas, la Corte Suprema, el Ministerio Público, todas las instituciones al servicio del crimen organizado y ahí es donde está todo lo escandaloso.

Otro elemento importante en el caso de JOH es que con él pasamos de un país de tránsito de cocaína a ser una nación productora. Y lo que hoy estamos viviendo es que los principales parques nacionales, en Olancho, en Colón, en Atlántida, etc, tienen cultivos de 5 a 8 años de plantaciones de coca.  

RP. ¿Con la salida y el encarcelamiento de JOH, Honduras ha quedado o quedará libre de esta corrupción vinculada al narcotráfico? ¿Qué tiene que pasar para que sea distinto?

EH. No. Al contrario, el expresidente puede estar encarcelado pero las estructuras que se beneficiaron y con las cuales trabajó siguen activas. Cuando uno ve que se sigue incautando droga o encontran cultivos de cocaína en distintas regiones del país, es que todo sigue intacto. Penosamente sigue vivo porque en Honduras avanzando en una economía criminal, fruto del lavado de dinero y del tráfico de droga, eso no se ha eliminado con la captura de Juan Orlando Hernández. Sigue vivo y activo.

Otro punto a tomar en cuenta es que la actual clase política no está libre de los señalamientos, los vínculos del narcotráfico siguen totalmente vivos dentro de los partidos y por ende dentro del Estado hondureño.

En conclusion, pueden haber capturado al narco, pero toda la estructura del narcotráfico sigue intacta en el país.

RP. ¿Crees que en Honduras existe la capacidad de comenzar a revelar e investigar aquellos empresarios o empresas que lavan dinero del narco?

EH. Es uno de los temas que se quiere mantener intacto. No se quiere revelar quien lava dinero, ahí hay una complicidad incluso de los narcos que han sido extraditados o condenados, porque uno lee y revisa los casos y no hay ningún dato que revele cómo hicieron para el lavado de dinero, a través de qué empresa o por ejemplo, cómo participó el sistema financiero en el blanqueo de esos capitales.

No sabemos qué tipo de empresas son y quiénes son los dueños, qué forma usan para lavar el dinero. El único caso que uno conoce y hace referencia es del Banco Continental, de la poderosa familia Rosenthal, pero el resto de bancos están limpios del dinero en narcotráfico, las otras industrias, como la de construcción, el agro, el comercio de bienes y raíces o mineras, ¿de verdad están libres de esos negocios ilícitos?

De estos temas no se habla en los juicios contra narcotraficantes, no se menciona el nombre de negocios y si existe complicidad incluso del propio Estados Unidos en estas actividades.

¿Sabías qué?
1 kilo de cocaína cuando sale de Colombia tiene un costo de $2000, puesto en Honduras vale $10,000, en Guatemala llega a $15,000, en México andaba por $35,000 y finalmente colocado en Estados Unidos podría costar hasta $100,000 (Informe Observatorio de la Violencia, UNAH)

Otro elemento que deja este juicio es que con el dinero del narcotráfico no hay nadie que se resista; policías, militares, jueces, fiscales, no hay alcalde, magistrado o candidato a presidente que no se deje conquistar por el narco. Todo por el estilo de economía alrededor del narcotráfico, y este es un tema que debemos seguir estudiando, pero sobre todo quienes tienen más acceso a información deben cuestionarse.

RP. Elvin, se puede creer en toda esta información que están brindando narcotraficantes confesos o extraditados que buscan reducir pena en Estados Unidos. Este ha sido un argumento de la defensa del expresidente Juan Orlando Hernández.  

EH. Conociendo la personalidad de Juan Orlando Hernández, lo que demostró en sus años en el poder, puedo concluir que en su imaginario y lo que busca proyectar es que él no tuvo nada que ver con todas las acusaciones que se le hacen, aunque la evidencia y los hechos dicen todo lo contrario. Aunque las pruebas y los testigos lo involucren en el narcotráfico y todas estas actividades ilícitas.

En sus años en Honduras, uno pudo ver la personalidad de JOH, es esa misma personalidad la que mantiene, incluso estos días de juicio, repitiendo que es víctima de criminales confesos.

RP. ¿Por qué Juan Orlando Hernández sí, por qué el Chapo Guzmán sí, pero otros narcotraficantes no? ¿A qué juega Estados Unidos, qué hay detrás del tema del narcotráfico?

EH- Uno siente que hay una especie de doble discurso en el caso del gobierno de Estados Unidos y su lucha contra el narcotráfico, porque por un lado es el país de mayor consumo de droga y es el destino final de esa droga. Luego hay una puesta por combatirla a través de la violencia, como hemos visto en Colombia, México y ahora en Centroamérica, donde su estrategia de combatir la droga es a partir de la saturación de armas y de militares en nuestros pueblos. Y se ha demostrado que esto lo único que genera es mayor cantidad de muertos. El drama de Centroamérica y México alrededor de los muertos en la lucha contra el narcotráfico es una cosa espeluznante y toda la evidencia dice que no se redujo nada el tema del narcotráfico.

Uno se pregunta por qué en vez de militarizar y combatir la droga a base de violencia no se busca legalizarla, y el dinero que se usa para esa violencia invertirlo en educación y prevención.

Y no puedo dejar de mencionar que Estados Unidos mantiene un doble discurso, estaban investigando a JOH desde el 2004 por narcotráfico, ya tenía evidencias sólidas, pero la primera persona que avaló su reelección ilegal en 2018 a pesar de la violencia que ejerció para quedarse en el poder, fue la señora Heide Fulton encargada de Negocio de EE.UU. Entonces hay un doble discurso.

¿Sabías qué?
Se calcula que cada año por territorio hondureño circulan al menos 70,000 kg de cocaína. (Informe Observatorio de la Violencia, UNAH)


Iolany Pérez

Periodista hondureña. Su trabajo se enfoca en la cobertura de temas de corrupción, medio ambiente, política, migración, género, estructuras de poder y derechos humanos. Ha trabajado por más de 15 años como reportera en Radio Progreso destinada a la producción radiofónica y notas a profundidad.

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