Primero de mayo en lucha contra el modelo extractivista

Celebramos el 133 aniversario de los mártires de Chicago y los 65 años de la gloriosa huelga de 1954, en un mundo amenazado de extinción por la decisión neocolonialista de los ricos del mundo liderado por el imperio de los Estados Unidos.

En Honduras celebramos este Primero de Mayo en el marco de un régimen dictatorial que representa la alianza articulada de una mafia política junto con la élite empresarial oligárquica y las transnacionales extractivistas, alianza que se sostiene con el respaldo del gobierno de los Estados Unidos, los militares y los líderes del crimen organizado. Nos hemos ganado ante el planeta el título de Narco Estado, conducido por un grupo de criminales que nunca como en este tiempo amenaza, depreda y cercena los bienes del país, los derechos sociales y salariales y la soberanía nacional en el marco de un insaciable sistema capitalista que hoy se profundiza a través del modelo neoliberal en su expresión extractivista y privatizador.

Conmemoramos este Primero de Mayo todavía con el olor de la sangre de los asesinados y presos políticos por haber ejercido su derecho a manifestarse en contra del fraude electoral y en contra de la reelección inconstitucional a través de los cuales se instauró la criminal y represiva dictadura que lidera Juan Orlando Hernández, perpetuando la impunidad y reprimiendo a la juventud pobre obligándoles a organizarse en caravanas para huir de nuestro territorio.

Tampoco podemos dejar de anotar que este Primero de Mayo lo conmemoramos con la movilización de amplios sectores sociales y populares que demandan castigo a corruptos, criminales, saqueadores del erario público y narcotraficantes. No obstante, la fragmentación y fragilidad de los sectores populares organizados, las juventudes, las mujeres, los pobladores, los pueblos originarios, campesinos y comunidades defienden con hidalguía sus territorios, bienes comunes, culturas, amenazados por el extractivismo, y en pie de testimonio se encuentran en las calles, con antorcha en mano exigiendo la salida y castigo del dictador y su estructura mafiosa y criminal.