| Lunes, 12 Junio 2023 |  |
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Tributo a Herminio Deras
Quienes conocimos y escuchamos hablar de Herminio Deras coincidimos en testimoniar que se trató de una persona apasionada por la lucha y su compromiso con su pueblo, convencido hasta el tuétano de que la lucha emprendida desde la honradez y la entrega ha de cristalizar en la transformación de la sociedad hondureña.
Herminio Deras ofrendó su vida por este ideal revolucionario. Sin duda Herminio Deras fue un ser humano que cargó con la realidad hondureña y con la causa de los oprimidos de manera integral. Herminio no solo fue el político y el educador, rasgos que lo identificaron a fondo. También fue el ser humano que en toda circunstancia compartió las tortillas y el sudor con quienes compartía la vida y la lucha.
Fue un ser humano leal a los grandes ideales y propósitos. Y fue leal en los detalles. Así como se entregó por entero a la lucha revolucionaria por la transformación del pueblo como político y educador, se entregó en sus detalles a las personas de carne y hueso. Ese testimonio de revolucionario queda como luz para las nuevas generaciones.
La revolución se construye y edifica desde la entrega a las grandes causas populares, desde el compromiso por construir un país compartido, pero con los pies y las miradas muy bien puestas en los detalles a la familia y a las personas que en su momento necesitaban de un abrazo, un consejo, unos zapatos, un sombrero, una tortilla y un espaldarazo para que nadie se quedara abatido o frustrado en el camino.
Herminio Deras no solo se acercaba a las personas para ganarlas como nuevos simpatizantes o militantes para el Partido. Se acercaba para establecer relaciones de amistad. Así lo testimonian muchas personas que lo conocieron como el amigo, el camarada, el compañero, el educador. Fue un abnegado amigo y orientador popular quien nos regaló su amistad para mostrar los caminos por donde andar juntos.
El tributo que se le hace a Herminio Deras este lunes 12 de junio ratifica al menos tres signos. Número uno, hacer memoria de su vida y entrega como símbolo de patriota y prócer nacional; número dos, la aceptación pública por parte del Estado de su responsabilidad directa en el crimen de un prodigioso hijo del pueblo; número tres, que la familia Deras provoque el reencuentre con la gente luchadora que conoció a Herminio y que junto con las nuevas generaciones nos comprometamos a proseguir la causa liberadora por la que dio su vida este héroe y mártir nacional.
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