Una visita internacional que dice mucho

Esta semana, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) está de visita en el país, la cual culminará el 3 de agosto. Ante ello es válido preguntarse por qué este órgano internacional viene especialmente a Honduras.

Las visitas en el terreno es una herramienta fundamental que utiliza la CIDH cuando conoce sobre una situación de derechos humanos que es grave en un país y que genera preocupación a la comunidad internacional.

Recordemos que la CIDH realizó una visita similar a la vecina Nicaragua entre el 17 y 21 de mayo de este año, debido a la grave crisis política que atraviesa en el marco de las protestas sociales y la violencia estatal para reprimirlas.

Con respecto a Honduras, a la CIDH le preocupan varios temas relacionados con la justicia e impunidad, violencia, desigualdad, institucionalidad democrática, derechos de niños, niñas y adolescentes y jóvenes, derechos económicos, sociales, culturales y ambientales y libertad de expresión.

En particular, este órgano interamericano analizará la situación de derechos humanos en el contexto postelectoral, en el marco del cual se cometieron graves crímenes que hasta el momento se mantienen en impunidad debido a la falta de voluntad política de las instituciones estatales.

Para realizar su trabajo, la CIDH se entrevistará con autoridades de los tres poderes del Estado y se reunirá con representantes de la sociedad civil y otros actores relevantes. Es importante resaltar que no se quedará solo en Tegucigalpa, sino que se desplazará al Bajo Aguan, San Pedro Sula, Tela y Puerto Lempira.

Además, mantendrá habilitada una oficina permanente en la capital para recibir denuncias e información sobre violaciones a derechos humanos, las cuales también tomará en los diferentes lugares a donde se desplace.

Al final de su visita brindará una conferencia de prensa para presentar sus observaciones preliminares. Sin duda, esta visita es una oportunidad para evidenciar la grave situación que atraviesan los derechos humanos en Honduras, pero también es un mensaje claro de que Honduras sigue estando bajo el ojo crítico de la comunidad internacional.