Asegurando que sus intenciones están basadas en la democracia y la equidad,  los partidos políticos Libertad y Refundación –LIBRE-,  Partido Anticorrupción -PAC, Innovación y Unidad –PINU- y  Liberal, anunciaron la conformación de una  Coalición Nacional Opositora.

La Coalición Nacional Opositora, en su primera intervención pública, demandó ser parte de la junta directiva del Congreso Nacional y una nueva Ley Orgánica  en ese poder del Estado, además anunciaron que en los próximos días impulsarán una propuesta para implementar  la segunda vuelta electoral a nivel presidencial, propuesta que ya ha sido descalificada por los miembros de la bancada del oficialismo.

Mauricio Villeda, presidente del Central Ejecutivo del Partido Liberal de Honduras, dijo que no pueden seguir soportando que una sola persona o un solo partido tengan el control total del país.

Mientras que Manuel Zelaya, coordinador del partido LIBRE, apuntó que la conformación de la Coalición Nacional Opositora es un mensaje democrático para la población hondureña, pero también un mensaje para el presidente Juan Orlando Hernández en el que le dicen que se le “está acabando la fiesta como gobernante”.

Un “verdadero” avance en materia de comportamiento político

La conformación de la Coalición Nacional Opositora surge mientras a lo interno de la bancada del partido LIBRE varios diputados y diputadas manifestaron su desacuerdo con las decisiones o posiciones de los líderes de ese partido, al punto que dispusieron abandonar el instituto político y formar una bancada independiente.

Por su parte, los miembros de la banca liberal y algunos líderes expresaron que para ellos no existía ninguna alianza de oposición, pues en ningún momento había sido consensuada o discutida.

Sin embargo, para la socióloga y catedrática universitaria, Leticia Salomón, ante los escenarios anteriores, el surgimiento de la Coalición Nacional Opositora es un avance en materia de comportamiento político.

“Porque se decía que hay opositores pero no hay oposición. La oposición articula a distintos partidos políticos, y en este caso con ideologías diferentes, con objetivos diferentes. Yo siento que todavía les hace falta ir avanzando en cuáles son esos propósitos para demostrarle a la ciudadanía que podemos confiar en que en el Congreso Nacional va haber una fuerza, que hará un balance y contrapeso ante los poderes Ejecutivo y Judicial”, opina Salomón.

Los propósitos, en los que debe de enfocarse la Coalición Opositora, deberían de pasar por enfocarse y ponerse de acuerdo para defender los intereses de la sociedad; el segundo criterio o propósito es volver realidad la función del poder Legislativo, que es ser controlador del desempeño de los otros poderes del Estado; y el tercer propósito tiene que ser encaminado a asegurar las condiciones para que las próximas elecciones sean transparentes y confiables, apunta Salomón.

Gustavo Irías, al igual que Leticia Salomón, considera como un hecho positivo  la creación de dicha coalición para la democracia, puesto que representa una real expresión de la correlación de fuerzas que se generó en el proceso electoral de 2013.

“¿Por qué positivo para la democracia?, porque esto pudiera abrir las posibilidades de generar verdaderos pesos y contrapesos de toda democracia, que realmente funciona y que vendría a neutralizar o a reducir la tendencia que actualmente tiene la tensión pública de una alta concentración de todos los poderes en el partido de gobierno”, explicó Irías.

Irías agrega que la conformación de un bloque de oposición deja en claro la profunda crisis que enfrenta el sistema de partidos políticos y la falta de correspondencia entre algunos liderazgos con el sentir de los niveles intermedios, incluso, de sus mismos organismos de dirección máxima: lo hemos visto en el partido Liberal, donde una buena parte de los diputados y diputadas en principio se manifestaban en contra del acuerdo que el presidente del Central Ejecutivo ha adoptado; y por otro lado vemos procesos de fragmentación en una buena parte de estos partidos de oposición.

Los analistas no descartan que el partido de gobierno realice acciones como la compra de conciencias  para tratar de debilitar a la Coalición Nacional Opositora, y evitar que jueguen un papel importante al momento de tomar decisiones trascendentales como la aprobación de la Ley Marco de Seguridad Social  y la elección de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia.