El caso de de cinco ciudadanos sirios, detenidos por el Instituto de Migración la noche del pasado martes en el aeropuerto Toncontín de Tegucigalpa, ha causado controversia por la falta de logística y la discriminación que el Estado hondureño ha demostrado en el tratamiento de personas que podrían tener carácter de refugiados. Cuatro de los jóvenes detenidos son estudiantes universitarios y uno de ellos es catedrático de una facultad de administración de una universidad en Siria.

El Centro de Investigación y Promoción de Derechos Humanos – CIPRODEH, quienes han acompañado el caso emitieron esta mañana un comunicado en el que constatan que los sirios entraron con documentos falsos a Honduras en su tránsito hacia Guatemala, según declaraciones que ellos brindaron a esta institución de derechos humanos. Ciprodeh documentó que una vez que fueron interceptados, estos ciudadanos sirios por Migración en Honduras; no tuvieron acceso a un traductor, a fin que estos pudiesen tener claridad, de los motivos de su retención.

«Las cinco personas de nacionalidad Siria, manifestaron que salieron huyendo de sus país debido a los enfrentamientos armados que existen en su país para proteger su vida y su integridad; donde no podían ni asistir a la universidad, mucho menos llevar una vida normal debido a los continuos ataques. Ante esto, el Estado de Honduras ha inobservado su obligación de proveer: asistencia médica, alimentación, una llamada a la que tienen derecho»; reza el comunicado.

Los cinco hombres se identificaron como Vasileios Bouzas, Charalampos Kyrimopou, Anastasios Bellios, Konstantinos Marinakis y Alexandros Tzempelikos y fueron detenidos porque había una alerta emitida por Interpol.

Estados Unidos ha expresado su preocupación por la llegada de refugiados de Medio Oriente después de los ataques del viernes 13 de noviembre en París, Francia, cuando murieron al menos 129 personas.

CIPRODEH reconoce que el Estado de Honduras tiene el derecho y la obligación de hacer las investigaciones necesarias sobre este caso; pero que también tiene la obligación de respetar el debido proceso y los convenios internacionales ratificados por Honduras.

«Alertamos al Estado de Honduras a no retroceder en la aplicación de la Convención Sobre el Estatuto de los Refugiados (Convención del 51), específicamente el Arts. 3 (No discriminación), 31 (No sanción pecuniaria, ni penal), 33 (Prohibición de expulsión ni devolución), para no exponerse a sanciones internacionales. CIPRODEH insta al Estado de Honduras a realizar las diligencias necesarias para aclarar este caso, sin discriminación por cuestión de nacionalidad (Art. 3 de la Conv. del 51); que base sus valoraciones en el sistema internacional de derechos humanos y derecho internacional», expresa el comunicado.

Los sirios llegaron a Honduras en un vuelo de Avianca procedentes de Costa Rica y presentaron pasaportes griegos que, según las autoridades hondureñas, habían sido robados en Atenas, Grecia.