Nuestro San Romero

El día 10 de octubre del presente año, en la capital hondureña se firmó un convenio entre el gobierno de la República, representado por Juan Orlando Hernández Alvarado, el Consejo Hondureño de la Empresa Privada de Honduras (COHEP), el sector energético y el sector bancario, representados en las figuras institucionales de la estatal de energía ENEE y la privada Empresa Energía Honduras, la Asociación Hondureña de Productores de Energía Eléctrica y la Asociación Hondureña de Instituciones Bancarias, con la bendición y aval de la embajada estadounidense a través de Heiden Fulton. Dicho convenio, contiene ocho importantes acciones “consensuadas” entre todas las partes.

Tiene como objetivo hacer una reforma integral del sistema energético, revisar contratos, recuperación de deudas, refinanciamiento y para no perder la costumbre otra comisión, entre otros objetivos. Inmediatamente de la firma, la señora Heiden Fulton, encargada de negocios de la embajada de los Estados Unidos en Honduras, en su cuenta de Twitter ponía el punto final de la bendición a ese convenio.

Cuqui Mejía, como se le conoce al gerente general de la estatal ENEE, dijo que dicha empresa cerraría al finalizar este año. El SANAA va por el mismo camino, la descentralización del sector salud, las constantes alzas e imposición de impuestos. Es Jesús Mejía el encargado de dar el tiro de gracia a la estatal. Otro nacionalista, Ricardo Álvarez, dijo que la ENEE ha llevado al abismo al país. Don Ricardo debería saber que quienes han llevado al abismo al país, no es la ENEE, sino el partido Nacional político al que ambos pertenecen.

Ese convenio esconde detrás, seguir profundizando los procesos de privatización de instituciones estatales, haciendo desaparecer al Estado muy sostenidamente. Esa firma del convenio es la consumación de la idea de Mercado por encima del Estado, en donde deben primar las inversiones privadas y el Estado debe desaparecer como el que tutela y sea un simple espectador más.

El Equipo de reflexión, Investigación y Comunicación hizo pública una investigación que caracteriza a los grupos de poder, élites y redes de lealtad al régimen que gobierna Honduras. Entre esos grupos poderosos están los sectores energético y bancario, los agroindustriales, entre otros más. “…esos grupos invierten en los rubros estratégicos de la economía, por lo que son un ejemplo relevante del cambio que se registra en las élites económicas contemporáneas”. Sumado a lo anterior también está la posición gubernamental de decir: “estamos listos para una nueva firma y acuerdo con el Fondo Monetario Internacional”.

Así que ese acuerdo firmado entre el gobierno de Hernández Alvarado, empresa privada del sector energético y bancario, con la bendición de la señora Fulton; no es otra cosa que la consolidación de los principales grupos de poder en Honduras y la total pérdida de soberanía, justicia, equidad y dignidad del pueblo.