Nuestra palabra

Miércoles, 27 de marzo de 2019

Que se tomen en serio las denuncias

En las últimas semanas el periodista David Romero Ellner ha divulgado diversas denuncias que involucran a la familia presidencial en actos millonarios de corrupción. Estas denuncias se unen a las acusaciones hechas públicas por uno de los abogados implicados en el nombrado caso Pandora, que señalan a Juan Orlando Hernández y a su familia en el desvío millonario de fondos de las arcas públicas.

Las denuncias de corrupción son de tal envergadura que el Ministerio Público debía ya haber actuado de oficio para confirmar o desvirtuar las mismas. Sin embargo, el silencio y la parálisis se imponen, mientras se ponen en marcha esfuerzos para desviar la atención sobre estas denuncias al poner el acento en la orden de captura que ha sido emitida por los tribunales de justicia en contra del periodista David Romero.

Poner el acento del conflicto en elevar el perfil personal y la captura del periodista y de los agraviados por delitos de calumnia y difamación, puede tener detrás una perversa decisión de desviar la atención al problema de fondo, que no es sino las denuncias que contienen datos precisos sobre millonarios saqueos de fondos públicos por parta de la llamada familia presidencial, así como la penalización de tales delitos.

No desviemos la atención, no mandemos a la tangente el asunto de fondo, no convirtamos en dimes y diretes un tema que tiene que ver con amenazas y procesos penales para quienes tienen como oficio ejercer la libertad de expresión y se atreven a denunciar la corrupción y el abuso de poder. No caigamos en la trampa de desviarnos hacia apasionamientos personales para restarle importancia a los temas de fondo.

De lo que se trata aquí es que Juan Orlando Hernández y el círculo más inmediato de su familia están siendo acusados de ladrones, que a manos llenas se han apropiado de bienes públicos. Por ello, exigimos al Ministerio Público, a la UFECIC y a la MACCIH que se dejen de cuentos, que investiguen estas denuncias, y de confirmarse los hechos de corrupción, que se enjuicien los implicados y se asuman todas las consecuencias.

Hacemos un llamado a la Señora Fulton, al señor Igor Garafulic y al cuerpo diplomático acreditado en nuestro país, a que se dejen de ambigüedades y se unan a esta exigencia ciudadana, y en la que insistimos: que el Ministerio Público, por oficio, proceda a confirmar o desvirtuar estas denuncias, y de resultar ciertas, que se proceda a enjuiciar a Juan Orlando Hernández y familia, conforme a un debido proceso judicial.

Escuchar y descargar Nuestra Palabra

Derechos compartidos, citando la fuente | Contáctenos | Misión | Historia | www.radioprogresohn.net