Martes, 01 Mayo 2018

Hoy, Primero de Mayo

El Primero de Mayo es un día sagrado, el más sagrado de los días en el calendario anual para el pueblo trabajador. Evoca sangre que desde 1886 se viene derramando por los derechos humanos y laborales. El Primero de Mayo está intacto. Es un día sagrado y un día de lucha. Lo que no está intacto es la fidelidad y compromiso de quienes aquí en Honduras se proclaman y autoproclaman dirigentes obreros y populares.

Eso sí, las consignas, los gritos de fuera joh, las camisetas y las mantas con fraseología revolucionaria no faltan. Nadie más gritará con más fuerza hasta acabar con las gargantas roncas que los dirigentes sindicales. Si por los gritos y consignas fuera, en Honduras contaríamos con la dirigencia sindical y obrera más combativa que incluso aquella que dirigió la huelga del 54 y más comprometida que aquella que condujo las luchas en Chicago en 1886.

Sin embargo, algunos de estos consigneros se codean, andan taco a taco con diputados, incluso como diputados, resolviendo minucias, incluso poniéndose de acuerdo con patronales y altos dirigentes políticos para sacar adelante sus comodidades e intereses particulares o de cúpulas.

No muchos días atrás, con un abrazo de hermandad y con una hermosa sonrisa al viento, a los hermosos y guapos dirigentes de las tres centrales obreras se les divisó en una fotografía mientras premiaban al jefe del gabinete de Juan Orlando Hernández, el mismito que leyó el decreto de Toque de Queda de diciembre pasado, y que sirvió de cortina legal para la mayor persecución y asesinatos conocidas en los últimos tiempos de manifestantes opositores al fraude electoral. Sin embargo, allí estaban, los dirigentes, pletóricos de felicidad, junto a su indiscutible héroe, Juan Ramón Hernández Alcerro.

Sin embargo, el Primero de Mayo sigue intacto, es muchísimo más que unos cuantos dirigentes vividores, es muchísimo más que unas cuantas gargantas gritonas que luego se la enjaguarán a punta de cervezas y ron debidamente importado. El Primero de Mayo es la causa obrera, de quienes solo tienen sus manos y su dignidad. Y es la memoria de mártires y de las gestas auténticamente heroicas del pueblo con sus nuevas dirigencias comunitarias, populares y territoriales.

En nombre de la sangre derramada y en nombre de las muchas luchas presentes y pendientes en nuestra destartalada Honduras, en este día Primero de Mayo, saludamos a las luchadoras y luchadores del pueblo, y desde nuestra radio Progreso nos comprometemos a estar siempre presentes con nuestro micrófono para transmitir desde nuestro compromiso, la voz, la mano, el sudor, las lágrimas y el canto de quienes prosiguen la causa libertaria de los pueblos, sin doblegarse y sin dobleces.

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